Coloca un huevo fresco en un plato junto con un puñado de azúcar y una vela blanca encendida. Este ritual es ideal para atraer armonía y dulzura a tu hogar. Mientras la vela se consume, concéntrate en visualizar tu casa llena de paz y amor. Al terminar, desecha el huevo y el azúcar en un lugar al aire libre, dejando que las energías positivas permanezcan contigo.