La ruptura después de 40 años de matrimonio me dejó destrozada. Nunca imaginé que nuestro amor terminaría así, pero desde que conocí a Mariela, todo ha cambiado. He seguido su orientación y, poco a poco, mi esposo ha comenzado a acercarse nuevamente a mí. Sé que hay esperanza para nuestro amor, y me siento más fuerte que nunca.