Sé que me ha hecho daño, un daño terrible, pero no consigo olvidarla. La amo, y a pesar de todo, no quiero perderla. Sé que es irracional, que debería alejarme, pero la idea de no tenerla en mi vida me destroza. Es una lucha constante entre el dolor y el amor, entre la rabia y el deseo. No sé qué hacer, solo sé que la necesito.