Desde que mi pareja llegó de esa conferencia en otra ciudad ya nada es igual. Unos días se la pasa feliz y otros ni me mira, me esquiva. Yo sé lo que pasa en esos lugares, me los conozco perfectamente bien. Por eso voy a recurrir a Mariela Gauna, porque he leído demasiadas cosas buenas de ella por aquí. Sus amarres de amor le dan la vuelta al mundo y eso es lo que estoy buscando.