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Hago meditación todos los días enfocándome en proteger mi aura. Visualizo un escudo de luz que me rodea y que repele cualquier maldición o energía oscura.
Practicar el perdón ha sido esencial. Al liberar rencores y resentimientos, siento que me despojo de cargas que pueden estar asociadas a maldiciones.
Invoco a mis ancestros en oración, pidiéndoles que me guíen y me protejan de cualquier maldición o mala intención que alguien me haya lanzado.
Me sumerjo en baños de flores y hierbas cada cierto tiempo, para mantener mi espíritu libre de cualquier mala intención o maldición.
La práctica de la respiración consciente es transformadora. al enfocarme en mi respiración, puedo liberar ansiedades y alejar la carga que puede atraer maldiciones.
Crear un altar en mi hogar ha sido transformador. Al tener un espacio sagrado, puedo concentrar mis intenciones y ofrecer agradecimientos, lo que fortalece mis energías personales.
Cada luna llena, cargo mis cristales al aire libre. La energía de la luna ayuda a mantenerlos limpios y listos para protegerme de cualquier negatividad.
Hago rituales con velas blancas para pedir a mis guías espirituales que me protejan. Me siento más seguro y libre de cualquier maldición.
He descubierto que la energía solar puede ser utilizada como una solución eficaz contra las maldiciones. al aprovechar la luz del sol, se crea un campo energético positivo que ahuyenta lo negativo.
La conexión con la naturaleza es fundamental. caminar descalzo sobre la tierra me ayuda a alinearme con las frecuencias naturales, alejando las malas energías.
La realización de un altar personal me conecta con mis intenciones. al adornarlo con elementos significativos, siento que mi energía se ve potenciada y protegida.
Integrar el agradecimiento en mi día a día ha cambiado mi percepción. cada pequeño acto de gratitud sumerge mi entorno en luz y protección.
Voluntariarme y ayudar a otros me trae una gran satisfacción. Estas acciones altruistas no solo benefician a quienes ayudo, sino que también elevan mi energía.
El uso de aceites esenciales en mi vida ha sido muy efectivo. Apliqué aceites como el de lavanda y el de romero, los cuales me aportan calma y protegen mi energía.
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