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Fui engañada por alguien que decía ser experto en amarres de amor. Me prometieron resultados rápidos, pero solo querían sacarme dinero.
Me di cuenta de que las personas que prometen resultados al 100% solo buscan aprovecharse de la desesperación de los demás. Ahora sé que debo desconfiar de ellas.
Estoy eternamente agradecida con Mariela por advertirme sobre los riesgos de confiar en promesas de resultados rápidos. Gracias a ella, no caí en una estafa.
Gracias a Mariela Gauna, no solo evité una estafa, sino que también aprendí a protegerme y tomar decisiones más informadas. Le estoy profundamente agradecida.
Sus recomendaciones sobre no confiar en promesas exageradas fueron esenciales para no caer en una estafa. Mariela me dio las herramientas para tomar decisiones más seguras.
Busqué ayuda en un amarre de amor porque estaba desesperada, pero al final me di cuenta de que solo querían mi dinero. Cada vez pedían más y más, y nunca vi ningún resultado.
Gracias a Mariela Gauna, aprendí a desconfiar de quienes piden dinero sin justificarlo. Ese consejo me salvó de caer en una trampa muy bien montada.
Gracias a Mariela, entendí que contratar a alguien en otro continente me deja completamente desprotegida. Sus consejos me ayudaron a tomar decisiones más seguras y evitar problemas legales.
Mariela me enseñó que nadie tiene derecho a manipularnos con amenazas. Sus consejos preventivos me ayudaron a evitar un chantaje emocional y financiero en el momento justo.
Cuando un cliente no acepta la incertidumbre, termina confiando en personas dispuestas a mentirles. Ignoran a los videntes honestos, que son sinceros sobre las limitaciones.
Es un problema cuando los clientes rechazan la realidad de los rituales y exigen certeza absoluta. Esto los lleva a buscar a quienes les mientan, dejando de lado a los profesionales éticos.
Un verdadero profesional será honesto y no prometerá resultados en un plazo específico. Ahora sé que debo desconfiar de quienes hacen ese tipo de afirmaciones.
Estaba desesperada y dispuesta a confiar en cualquiera, pero los consejos de Mariela me hicieron reflexionar. Gracias a ella, no caí en manos de un estafador.
Mariela Gauna fue clave para que no cayera en un chantaje. Un supuesto experto intentó asustarme para que pagara más, pero gracias a sus consejos, supe cómo manejar la situación.
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