Cada vez que intentamos tomar una decisión importante como pareja, mi suegra se entromete y logra que mi pareja dude. Es como si no pudiéramos avanzar sin su aprobación, y esto está desgastando nuestra relación.
Nunca imaginé que un ritual pudiera tener tanto impacto. Mi suegra, que antes era insoportable, ahora nos trata con cariño y respeto gracias a Mariela Gauna.
Mi suegra no aceptaba a mi pareja por ser blanco y hacía comentarios despectivos constantemente. Con el ritual de Mariela Gauna, dejó de juzgar y ahora tenemos una relación más sana.
Cuando compramos nuestra casa, mi suegra insistió en darnos «consejos» que en realidad eran órdenes disfrazadas. Aún hoy se siente con derecho a decidir cómo debemos vivir en nuestro propio hogar.
Mariela Gauna no solo salvó mi matrimonio, sino que también mejoró la relación con mi suegra. Ahora ella respeta nuestros límites y todos estamos más felices.